(Editor’s note: To include our Latino brothers and sisters in The Messenger, we invited Fr. Salvador Gonzalez, OMI to write on issues important in the Catholic Church. We include both the English and the Spanish, and we will run a column like this as often as space permits.)
Pope Francis recently canonized in Washington D.C., Blessed Junipero Serra, who is referred to as founder and missionary to the “Upper Californias” as they were called in his time.
With this process the Church declared holy the missionary Franciscan friar who was born in Mallorca, Spain in 1713 and died in 1784 in Mexico.
In 1730 Serra takes the name of Junipero upon entering the Franciscan order at age 16.
Seven years later he was ordained a priest and earned a doctorate in theology.
In 1749 he was sent as an apostolic missionary in the company of other religious to Mexico, where he held various management positions in the Franciscan convent.
After the expulsion of the Jesuit priests of Baja California, the Franciscans occupied the missions in the region and subsequently in 1769, when the Spaniards began their conquest of Upper California, Fray Junipero and his missionaries consecrated themselves to the task of sharing the Gospel to the natives.
St. Junipero was one of the founders of the missions of San Diego (1769), San Carlos (1770), San Antonio (1771), San Francisco (1776), San Buenaventura (1782) and other cities in California.
These missions were places of welcome and refuge for thousands of natives, whom St. Junipero defended from military authorities of the Californians who conquered territories, a move that aroused admiration for his work, according to historical accounts.
The process for his canonization began in 1984 when he was declared venerable and in 1988 when he was beatified by St. Pope John Paul II.
During his recent visit to the United States, Pope Francis canonized Junipero Serra by his own decision at the Basilica of the Immaculate Conception in Washington, D.C., the first time a saint was canonized on American soil.
In California, a lot of people venerate St. Junipero Serra, and the missions he founded are now important historical monuments and privileged places of worship, holding religious and cultural significance for that state. The missions founded by St. Junipero Serra are still sought after by many Hispanic Catholics for their weddings, baptisms and quinceañeras.
St. Junipero Serra pray for us, the people for whom you gave your life to the service of the Church.
— Fr. Salvador Gonzalez, OMI,
pastoral staff, shrine
(Con el fin de incluir a nuestros hermanos y hermanas en El Mensajero latino, contamos con la ayuda del P. Salvador González, OMI para escribir sobre temas importantes en la Iglesia Católica. Incluimos el artículo en Inglés y en Español, y vamos a incluir un artículo similar de acuerdo al espacio permitido.)
El papa Francisco canonizo recientemente en Washington DC, al beato Fray Junípero Serra, conocido como fundador y misionero de las así llamadas “ altas Californias.”
Con este proceso la Iglesia declaró Santo al fraile franciscano que nació en Mallorca, España en 1713 y murió en 1784 en México. En el año 1730 después de su ingreso al orden franciscana y su noviciado profesó sus votos en el convento de Palma y cambió su nombre de nacimiento por el de Junípero. Siete años después fue ordenado sacerdote y se doctoró en teología.
En 1749, se trasladó como misionero apostólico en compañía de otros religiosos a México, donde también ejerció diferentes cargos directivos en los conventos franciscanos.
Luego de la expulsión de los sacerdotes jesuitas de la Baja California, los franciscanos ocuparon las misiones en esa región y, posteriormente, en 1769, cuando los españoles iniciaron la conquista de la Alta California, fray Junípero y sus misioneros se consagraron la tarea de compartir el Evangelio con los indígenas.
San Junípero fue uno de los fundadores de las misiones de San Diego (1769), San Carlos (1770), San Antonio (1771), San Francisco (1776), San Buenaventura (1782) y otras localidades de California.
En estas misiones fueron acogidos miles de indígenas, a quienes San Junípero defendió frente a las autoridades militares que conquistaron los territorios californianos, acción que despertó la admiración hacia su labor, según relatos históricos.
El proceso para su canonización inició en 1984 cuando fue declarado venerable y en 1988 fue declarado beato por San Juan Pablo II. Durante su reciente visita a Estados Unidos, por decisión propia el Papa Francisco canonizó a un Santo en tierra Americana por primera vez en nuestra historia en la basílica de la Inmaculada Concepción en Washington DC.
En California, una gran cantidad de personas veneran a Junípero Serra, y las misiones que fundó son todavía hora importantes edificaciones históricas y lugares religiosos privilegiados por su significado religioso y cultural de ese estado. Las misiones fundadas por San Junípero Serra todavía hoy son buscadas por muchos católicos hispanos para sus bodas, bautismos, y quinceañeras.
San Junípero Serra ruega por nosotros, el pueblo por quien diste tu vida al servicio de la Iglesia.
— P. Salvador González, OMI,
Equipo Pastoral del Santuario